La palabra Halloween proviene de la contracción inglesa de las palabras “All Hallows Eve”, que significan “víspera de todos los santos”. Aunque ha sido en EEUU donde esta fiesta se ha popularizado, la verdad, es que su origen es celta, cultura que hace miles de años ya celebraban el Samhain o fin de la cosecha por estas fechas. Se creía que durante la noche del Samhain los muertos visitaban a sus seres queridos, aunque en ese regreso, también estaban incluidos los malos espíritus y, para ahuyentarlos, los celtas bailaban alrededor del fuego, disfrazados con máscaras horribles.
Esta costumbre fue exportada por los inmigrantes irlandeses a EEUU donde tuvo una gran aceptación y evolucionó hasta el pseudo carnaval de disfraces actual. De aquí se extendió por la mayoría de los países anglosajones y al resto del mundo, incluida España.

Pero ya, en nuestro país, existía anteriormente una celebración parecida a Halloween que proviene de estas tradiciones celtas que arraigaron en la península antes de la romanización. En la víspera del 1 de noviembre, en muchas zonas del norte y del centro de la península se celebraban rituales para ahuyentar los malos espíritus. En lugares como Galicia son muy conocidas las meigas, en Asturias era habitual ya en el siglo XVIII que los niños fueran pidiendo comida por las casas y en Madrid y otros pueblos de Castilla existía la tradición de decorar las puertas de las casas con calabazas (calabacines, botijos e incluso ollas), talladas en forma de cara con una vela dentro. También se tocaba una campanilla hasta la madrugada y se vestía de negro.
Todo esto queda reflejado en la leyenda “El monte de las animas” relatada por Gustavo Adolfo Bequer, donde se recrea la celebración de “la noche de las animas” que tenía lugar en Soria. Aquí se realiza una procesión muy famosa llamada «Ritual de las Ánimas», en la que las personas cantan por la noche mientras llevan en las manos velas protegidas por botes, calabazas o cacharros de barro agujereados para finalmente hacer una gran hoguera. En la actualidad se sigue realizando, a la par que se homenajea al célebre escritor.
La cultura cristiana quiso acabar con estas festividades paganas adaptándolas al calendario católico, llegando a lo que hoy conocemos como celebración del día de Todos los Santos donde lo tradicional es visitar los cementerios para llevar flores a las tumbas de nuestros seres queridos. Pero el paso del tiempo ha hecho que el influjo y la magia de estas celebraciones que conectan el mundo de los vivos y el reino de los muertos se convierta en algo muy atractivo para nosotros haciendo que esta antigua tradición se viva ahora con más fuerza que nunca.

Si a ti también te gusta Halloween y tienes ganas de fiesta ¿has pensado ya como vas a celebrarlo? Brujas, zombis, fantasmas…En Halloween, todo vale y para que pases una velada de miedo, te damos algunos consejos:

• Alquila una casa rural: convierte la noche más terrorífica del año en una de las más divertidas y para ello nada mejor que juntarte con tus amigos o familiares en un lugar grande donde todos podéis contribuir a crear la atmósfera ideal para la ocasión.  Aquí te dejamos todas estas casas libres para Halloween
• Realiza una fiesta de disfraces. Halloween no es Halloween si no hay fiesta de disfraces: fantasmas, brujas, piratas, vampiros, etc.
• Decora la casa de forma terrorífica. Crear un ambiente terrorífico es importante. Valen todo tipo de accesorios como telarañas, calabazas, velas, esqueletos, etc.
• Música de terror. Es importante buscar una música adecuada. Crea tu propia lista de reproducción de canciones para Halloween.
• Comida fantasmagórica. Por supuesto tienes que realizar un menú acorde con la situación. En internet encontrarás numerosas ideas para que te inspires: sándwiches en forma de ataúdes, pócimas humeantes, etc,
• Ciclo de películas de miedo. Busca películas que os sumerjan en esta terrorífica noche. Se trata de que no peguéis ojo. Dependiendo si todos sois adultos o si hay niños tendrás que hacer la elección. Hay para todas las edades.
• Haz un cluedo en vivo. Un evento diferente es organizar una cena donde los comensales tengan que resolver un asesinato. Podéis recurrir a vuestra imaginación o comprar un kit de fiesta que incluya un guion, personajes y un disfraz. A lo largo de la noche cada uno deberá desarrollar su rol y descubrir quién es el asesino que aspira a no ser descubierto en esta fiesta de Halloween.  

Ya no hay excusa. Da rienda suelta a tu imaginación y celebra un Halloween diferente.